Métodos de pago internacionales: Carta de crédito

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I

Introducción

En la mayoría de compraventas internacionales de mercancías las partes contratantes (exportador e importador) son desconocidos que no han entablado una relación de confianza. Ante el riesgo de impago o de falta de entrega de las mercancías objeto de la transacción, surge la necesidad de crear medios de pago que garanticen que ambas partes verán satisfechas sus pretensiones.

Hoy en día existen una gran variedad de medios de pago que pueden emplearse en las transacciones internacionales para minimizar el riesgo de incumplimiento de las partes. Entre estos métodos, encontramos la carta de crédito.

La carta de crédito es uno de los medios de pago internacionales más seguros, tanto para el exportador como para el importador, en tanto que implica la intermediación de instituciones financieras que limitan la posibilidad de las partes contratantes de no cumplir con su obligación principal tras recibir la contraprestación de contrario.

A continuación, expondremos el funcionamiento de la carta de crédito, los tipos que existen y las ventajas e inconvenientes de su utilización.

II

La carta de crédito: definición

La carta de crédito es un instrumento mediante el cual el importador (ordenante) solicita a una entidad financiera (banco emisor) que se comprometa a pagar al exportador (beneficiario) una cantidad de dinero por la compraventa de una mercancía determinada. El banco emisor retiene la cantidad ingresada por el importador en su entidad financiera y solo procede a su entrega al beneficiario contra la presentación debida de documentos, en los términos y plazos pactados en el propio documento de encargo.

En la mayoría de cartas de crédito suele intervenir, también, un banco corresponsal que es el la entidad financiera que se encarga de la recepción del dinero, emitido por el banco emisor, y de su entrega al beneficiario.

Mediante la carta de crédito tanto el comprador como el vendedor consiguen suprimir el riesgo de que, tras cumplir debidamente con su obligación principal, la contraparte no pague el precio o no entregue la mercancía pactada, viendo así frustrada su pretensión contractual.

III

Tipos de cartas de crédito

Existen distintas modalidades de carta de crédito en función de sus requisitos y plazos. Podemos distinguir algunas de ellas atendiendo a su:

 

  • Revocabilidad. Existen cartas de pago revocables e irrevocables. Con carácter general, las cartas de crédito son irrevocables, es decir, para su modificación resulta necesario el acuerdo de todas las partes involucradas.
  • Forma de pago. Atendiendo a la forma de pago distinguimos entre cartas de crédito a la vista y a plazo. Las cartas de crédito a la vista son aquellas en las que la entrega del precio tiene lugar con carácter inmediato. Pueden ser “contra documentos” o “con pago adelantado”. En las primeras el importador realiza el pago contra presentación de los documentos pactados; mientras que en las segundas el pago se efectúa con carácter previo al embarque, contra un simple recibo y ante la promesa escrita de devolver el dinero si el embarque no se llega a efectuar.

Por otro lado,las cartas de crédito a plazo son aquellas en las que el pago se realiza a posteriori, es decir,en un plazo de tiempo pactado por las partes, a computar a partir de una fecha concreta (por ejemplo, el embarque).

 

  • Transferibilidad. Existen cartas de crédito transferibles e intransferibles. En las primeras el exportador está legitimado para transferir todo o parte de sus derechos a otro sujeto, en los términos y condiciones especificados en el crédito original. Esta modalidad de cartas de crédito se suelen utilizar en aquellos supuestos en los que el exportador actúa como agente del importador y no como exportador final.
  • Posibilidad de renovación (revolventes o rotativas). Las cartas rotativas son aquellas que pueden ser renovadas, total o parcialmente, hasta la fecha de vencimiento acordada entre las partes. Esta modalidad resulta muy útil en aquellas transacciones que se realizan mediante embarques parciales, porque evita que el importador tenga que emitir una carta de crédito para cada embarque.
IV

Ventajas y desventajas de este método de pago

Como hemos comentado anteriormente, la carta de crédito es uno de los medios de pago internacionales más seguros, tanto para el exportador como para el importador. La ventaja principal de la carta de crédito es que la intervención de uno o varios terceros (banco emisor y corresponsal) traslada el “riesgo de incumplimiento” a dichas entidades mediante la adición de su compromiso de pago.

Desde el punto de vista del importador le garantiza que la mercancía será enviada antes de proceder al pago y que el vendedor deberá cumplir con las condiciones acordadas en la propia carta de crédito para poder cobrar el precio.

Por otro lado, podríamos decir que la mayor desventaja para el comprador de utilizar este método de pago consiste en que no puede obligar al vendedor a que envíe las mercancías especificadas, es decir, aparte de la retención del pago, no se le proporciona ningún otro método para constreñir al vendedor para que envíe las mercancías.

Desde el punto de vista del exportador las desventajas son mínimas y relativas a los costes en que debe incurrir para emplear este método, mientras que la mayor ventaja de este medio de pago es que le garantiza la solvencia del comprador antes del envío de las mercancías.

V

Conclusiones

En las transacciones internacionales la distancia y la existencia de diferencias culturales o idiomáticas pueden dificultar el establecimiento de relaciones de confianza entre las partes, pudiendo incluso llegar a frustrar la celebración del contrato. Como hemos visto, la carta de crédito es un instrumento que permite superar estas dificultades y facilita el comercio internacional.

En atención a la seguridad que aporta a las transacciones, es un recurso muy utilizado, en cualquiera de sus modalidades, en el comercio internacional.

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