Como ya adelantábamos en el anterior articulo la Ley de inversión extranjera de China presenta algunos límites en relación a los sectores en los que la inversiónextranjera está prohibida o restringida.
De hecho no todos los sectores industriales están abiertos a la inversión extranjera en China. Desde 1995, el gobierno chino publica periódicamente una lista que contiene la indicación obligatoria de los sectores industriales en los que esta permitida la inversión extranjera (Catalogue of Industries for Guiding Foreign Investment (Revision 2019). En la Lista, estos sectores se clasifican como «alentados», “permitidos”, «sujetos a restricciones» y “prohibidos”. En el caso de las inversiones «alentadas», el inversor podrá beneficiarse de una inversión con todas las garantías. En el caso de las inversiones «restringidas», el inversor se somete a ciertas limitaciones y condiciones (por ejemplo, en términos de porcentaje máximo de participación en el capital social); en el caso de las inversiones «prohibidas», deben considerarse totalmente excluidas de las inversiones extranjeras. Cualquier sector que no se encuentre entre los incluidos en la lista, deberá considerarse como una inversión «permitida».
En cambio, en las distintas Free Trade Zones (en adelante “FTZ”) establecidas en China, se aplica el criterio de la llamada «Lista Negativa», en virtud de la cual en el territorio de la FTZ se permiten las inversiones extranjeras en todos los sectores industriales que no estén expresamente prohibidos o sujetos a restricciones sobre la base de la mencionada Lista Negativa.
Tras la publicación en noviembre de la lista negativa de acceso al mercado de 2019, se ha podido comprobar qué es la primera revisión anual desde su aparición y aplicación en todos los aspectos del sistema de la lista negativa de acceso al mercado. Se considera, sin embargo, que dará un mayor impulso al mercado y aumentará aún más el interés por China.
Ya la anterior versión del 2018 había introducido una primera reducción respecto al 2017, bajando de 95 a 45 el número de sectores incluido en la lista negra. De hecho los principales sectores afectados fueron la agricultura, la minería y el sector cultural. Las medidas incluyeron un aumento del porcentaje de capital social permitido a los inversores extranjeros en el cultivo de nuevas variedades de trigo y maíz y en la producción de semillas (del 49% al 66%); la eliminación de las restricciones a las empresas conjuntas en el sector del petróleo y el gas; y la posibilidad de que los inversores extranjeros tengan una participación mayoritaria en empresas del sector del ocio y el entretenimiento.
No obstante, en comparación con la edición de 2018, la nueva versión de la lista negativa de inversiones extranjeras se ha reducido todavía más, introduciendo además, un paquete de nuevas medidas de apertura.
Desde el punto de vista industrial, en primer lugar se ha promovido la apertura delsector de los servicios. En el sector del transporte, la nueva lista negativa elimina la restricción a los transportistas nacionales que se encontraban controlados por la parte china; en el sector de las infraestructuras, se eliminan las restricciones impuestas a las empresas que se dedican al gas combustible y a la red de gasoductos para el suministro de calefacción en ciudades con una población de más de 500.000 habitantes; en el ámbito cultural, el control accionario de las salas de cine y de las instituciones de intermediación de espectáculos ya estará en manos de China; además, se han eliminado las restricciones a la inversión extranjera en servicios relacionados con el almacenamiento y la transmisión, los centros de llamadas y la comunicación nacional multipartidaria; por último, también se ha flexibilizado el acceso a la agricultura, la industria minera y el sector manufacturero. En este sentido, Zhang Fei, subdirector del Instituto de Investigación para la Inversión Extranjera del Ministerio de Comercio de China, dijo que:
«Con la edición 2019 de la lista negativa, las restricciones al control de la equidad en las zonas francas se han relajado considerablemente. Podemos decir que el gobierno chino ha maximizado el nivel de apertura industrial.’’
En la «Lista de Inversión Estimulada», se han establecido un gran número de sectores que quedan abiertos a la inversión extranjera, en los que el capital extranjero goza de políticas preferenciales por ley. En concreto, más del 80% de las cláusulas nuevas o revisadas se refieren al sector manufacturero: el objetivo es atraer más inversión extranjera en la producción de alta gama, la producción inteligente y la producción ecológica. En cuanto a lo que la industria de la información electrónica se refiere, se han añadido nuevas cláusulas relativas a los componentes esenciales del 5G. La lista también fomenta la inversión en servicios de producción y apoya la transferencia de industrias de capital extranjero a las regiones central y occidental de China.
La «Lista Negativa de Acceso a la Inversión Extranjera» y la «Lista de Inversión Estimulada» reducen el número de restricciones y aumentan el número de sectores abiertos a la inversión extranjera. En ambos casos, se destaca la determinación con la que China persigue la expansión de su apertura.
El gigante chino conoce la estrategia y trabaja para ponerla en funcionamiento de forma efectiva: aumentando la apertura al país, fortaleciendo la protección de los derechos de propiedad intelectual, así como promulgando la nueva Ley de Inversiones Extranjeras, junto con 12 medidas de apertura al exterior.
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